lunes, 23 de febrero de 2009

Expansión europea y desarrollo del sector secundario

La expansión europea, tanto militar como comercial, se consolidó a finales del s.XV con los grandes descubrimientos de América (Colón) y la India (Vasco de Gama). Las potencias que iniciaron esta expansión fueron Portugal y Castilla, seguidas por Holanda, Gran Bretaña y Francia en el s.XVII, lo cual pone de manifiesto el paso de la supremacía de los países mediterráneos a los del norte.
En cuanto al comercio europeo, podemos distinguir 3 circuitos principalmente: El triángulo Sevilla-Lisboa, Flandes y dos rutas extraeuropeas; el circuito mediterráneo, que empezó a sustituir el comercio de mercaderías por el de dinero; y el comercio con el báltico.
La llegada masiva de metales preciosos, principalmente procedentes de América, provocó un importante incremento de los precios a lo largo del s.XVI, lo cual fue una de las causas de la crisis que experimentó Europa en esta época. Las zonas más afectadas fueron las que producían o recibían estos metales en mayor medida, que en este caso se trataba de los países mediterráneos. Por lo tanto, entre los siglos XVI-XVII, se produjo una debacle del poder ibérico en favor de Holanda, Gran Bretaña y Francia, que crearon nuevas formas de explotación colonial. Destacan las Compañías comerciales y las plantaciones de monocultivo (cacao, azúcar, tabaco...).
En cuanto al sector secundario, sus características entre los siglos XVII y XVIII son: continuidad tecnológica, crecimiento cuantitativo de la actividad industrial y papel secundario en el conjunto de la economía. Los principales sectores de esta época son: la minería (innovaciones que permiten trabajar a mayor profundidad y separar más fácilmente los metales de la ganga), la siderurgia (aparecen los altos hornos), la construcción naval (incrementó el tipo, el número y el tonelaje de los barcos) y el sector textil (el más importante, ya representa la mayor parte de la producción y genera muchos puestos de trabajo. La innovación principal son los nuevos tipos de paños, más baratos, ligeros, se podían elaborar en cualquier lugar, con menos instalaciones...).
Este desarrollo permitió la aparición de la figura del empresario, que comportaba la conversión de los maestros gremiales en trabajadores a sueldo. Con este cambio de estructura encontramos el putting out system (el empresario contrata a maestros, les indica las características de los productos que desea y les da el capital necesario. Con esto obtiene estandarización, control de la calidad e incremento de la producción) y el domestic system (campesinos convertidos en empresarios cuya principal actividad es la producción artesanal). La culminación del traslado del trabajo artesano al campo es la protoindustralización. Sin embargo, pronto se vieron los problemas de trasladar el trabajo al campo cuando aparecieron las fábricas.

martes, 17 de febrero de 2009

Las sociedades agrarias (2ª Parte)

El sistema feudal era la forma de organización más común en las sociedades europeas preindustriales. Se caracterizaba por el dominio de los señores feudales tanto político, como económico y jurídico. Estos señores incrementaban su renta a través de las prestaciones cobradas a los campesinos (en trabajo, dinero o especie), denominadas renta feudal; de la renta de la tierra (pagos en dinero y a parte de frutos) y también del diezmo (la mayor parte de los altos cargos eclesiásticos los ocupaban miembros del estamento feudal).
Una de las causas del incremento de la renta feudal era el aumento de la productividad, que se producía como consecuencia de una retroalimentación positiva entre el aumento de la población, la tierra disponible y la demanda. De manera que la producción crecía más que la población. Pero cuando ya no había más tierra cultivable o la que había no era de tanta calidad, la productividad bajaba aunque se aplicara más trabajo o tecnología, ya que la tierra está sometida a la ley de rendimientos decrecientes, elaborada por David Ricardo. Esta situación provoca el inicio de una fase de crisis.
El sistema feudal también sufrió una crisis (siglos XIV-XV) que provocó enfrentamientos entre el estamento feudal, la monarquía y el campesinado; la pérdida de poder de los señores feudales y la disminución de sus riquezas. Finalmente la crisis acabó con una recomposición del sistema feudal.
De esta época también cabe destacar la recuperación del comercio y el inicio del comercio a larga distancia, especialmente entre Europa y Próximo Oriente.
Todo este tema nos permite comprender las desigualdades actuales entre ricos y pobres, que se fueron creando y desarrollando ya en la etapa preindustrial. Poco a poco, se fueron formando los estamentos sociales que agrupaban a la población según su renta. Así, los ciudadanos más ricos gozaban de privilegios mientras que los pobres sólo tenían obligaciones. También he podido observar que las mejoras económicas, agrarias... incrementaban, en general, aún más estas diferencias.

Las sociedades agrarias (1ª Parte)

El ser humano ha sido la mayor parte de su historia un depredador omnívoro. No ha sido hasta los últimos 10000 años cuando algunas sociedades empezaron a compaginar sus actividades de caza y recolección con la agricultura y la ganadería. La causa principal fue el incremento de la población. Este importante cambio comportó sedentarismo y cambios mentales y organizativos, tales como la división del trabajo o los primeros sistemas de escritura.
La evolución de la población de las sociedades agrarias se puede explicar mediante el modelo demográfico antiguo, caracterizado por unos índices altos de natalidad y mortalidad y una baja esperanza de vida al nacer.
A causa del crecimiento demográfico, Malthus elaboró su teoría, según la cual todas las sociedades tienen un límite en la cantidad de alimentos de que pueden disponer (techo maltusiano), ya que la producción crece en progresión aritmética y la población en progresión geométrica. Pero existen una serie de frenos o controles que permiten disminuir o, incluso cambiar, el signo del crecimiento. Estos frenos son los compulsivos (incremento de la mortalidad) y los preventivos (disminución de la natalidad). Hay que destacar que las sociedades que utilizan frenos preventivos (en la época preindustrial sólo Europa Occidental) se quedan más lejos del techo maltusiano y no llegan a los niveles de pobreza que tienen aquellas sociedades en las que la mortalidad es la principal causa de limitación de población.
En cuanto a la producción agrícola, la agricultura tradicional, dependía de la tierra, el trabajo, las técnicas disponibles y en menor medida del capital. En esta época, todo procedía de la tierra: alimentación, energía... (economías orgánicas). Podemos diferenciar entre la agricultura mediterránea y la del norte. La primera se caracterizaba por disponer de tierras fáciles de cultivar con el arado romano, aunque eran pobres y afectadas a menudo por la sequía. Las tierras del norte de Europa eran más compactas (se necesitaba una mejora del arado romano: el arado de ruedas) y de más calidad. Su principal característica común era el aislamiento y la principal diferencia, la organización de la producción. Hay que destacar que la aparición del arado de ruedas, junto con la invención del yugo y la herradura, permitieron el inicio de un gran ciclo de crecimiento agrario. Continuará...